Inicio » Bienestar » Pasar tiempo en la naturaleza reduce el estrés y la depresión

El pasado 29 de marzo de 2023, elDiario.es publicó la siguiente noticia: ‘Aumentar las zonas verdes de Barcelona podría reducir un 13% el consumo anual de antidepresivos’.

Como mencionamos la semana pasada en nuestro blog, España es uno de los países que más antidepresivos y ansiolíticos consume, dato realmente alarmante. Las causas de este alto consumo de medicamentos las explicamos en el artículo mencionado anteriormente, que puedes leer aquí.

Hombre andando entre la naturaleza.

Según un estudio del ISGlobal, tan solo el 20% de la población de Barcelona tiene el acceso a espacios con vegetación que recomienda la OMS. Natalie Mueller, investigadora de ISGlobal, resalta que solo el 11% de la ciudad de Barcelona está ocupada por espacio verde, siendo necesaria una ampliación de entornos naturales para el bienestar general de la población.

Naturaleza y salud mental

La evidencia científica señala numerosos beneficios de pasar tiempo en la naturaleza, impactando directamente sobre la salud física y mental de las personas:

  • Reducción de estrés: La naturaleza puede ayudar a reducir el estrés, la ansiedad y el agotamiento [1]. Diversos estudios han demostrado que la exposición a entornos naturales disminuye los niveles de cortisol (hormona del estrés), reduciendo así el estrés fisiológico [2]. La actividad física realizada en la naturaleza ayuda en este aspecto, colaborando también en la reducción del estrés [3].
  • Mejora del estado de ánimo: Conectar con la naturaleza y pasar tiempo en ella se ha relacionado con un mayor bienestar psicológico y una baja ansiedad somática [4]. No hace falta ir a la sierra o a el norte para alcanzar estos beneficios, las zonas verdes del pueblo o ciudad donde vivimos también ayudan en este aspecto. En resumen, los estudios han concluido que incluso pequeñas dosis diarias de tiempo en la naturaleza o espacios verdes pueden mejorar el estado de ánimo y promover los sentimientos de bienestar y felicidad. Hay estudios que relacionan el acudir diariamente a espacios naturales con mayores niveles de satisfacción con la vida [1], la promoción de la autopercepción positiva de la imagen corporal [5] y la mejora en el desarrollo de capacidades, calidad de vida y crecimiento personal a través de la realización de caminatas en estos entornos [6]. Además, se ha observado que la exposición a la naturaleza incrementa los niveles de serotonina.
  • Mejora de la salud mental: Los estudios realizados sobre la relación entre la salud mental y los espacios naturales resaltan que la naturaleza presenta un factor protector en la prevención y reducción del riesgo suicida [7]. También se observa una disminución de los síntomas depresivos al dedicar parte de nuestro tiempo en espacios verdes [8]. Por último, se relaciona con una menor probabilidad de desarrollar enfermedades mentales graves.
  • Mejora de la calidad de sueño: Pasar tiempo en la naturaleza puede ayudarnos a mejorar nuestra calidad del sueño. Por un lado, ir a la naturaleza implica exponerse a la luz natural del día, restaurando y/o mejorando nuestro ritmo circadiano. También afecta a la reducción del estrés y la ansiedad, disminuyendo así los trastornos del sueño. Todo esto, junto con la actividad física realizada en entornos naturales, puede mejorar nuestra calidad del sueño y ayudarnos a descansar mejor.
  • Aumento de la creatividad: Pasar tiempo en espacios naturales incentiva la creatividad y la resolución de problemas. Mediante la inspiración y la calma, las personas mejoran su capacidad para resolver problemas, desarrollar nuevas ideas y comenzar nuevos proyectos.
    Mejora de la función respiratoria: Los seres humanos, sobre todo aquellos que residimos en ciudades, nos exponemos constantemente a innumerables contaminantes ambientales, empeorando nuestra función respiratoria y nuestra salud global. Respirar aire fresco y limpio en la naturaleza mejora la función pulmonar y ayuda a reducir los síntomas de enfermedades respiratorias, como el asma.
  • Aumento de actividad física: Los entornos naturales promueven la actividad física,  ya sea caminar al aire libre, hacer senderismo, nadar, montar en bicicleta, patinar… Todas estas actividades aumentan la actividad física y mejoran la salud cardiovascular.
  • Aspecto psicosocial: La inmersión en espacios naturales nos permite generar relaciones sociales positivas, ya que promueve la interacción social, las charlas extensas, la reflexión, etc. También se ha observado que promueve la intención de ayudar a los demás, aumentando la sensación de comunidad y cohesión grupal [9]. Este beneficio psicosocial depende de las actividades y el contexto sociocultural en el que se desarrolle la relación con el entorno natural.

Por todas estas razones (entre muchas otras), los entornos naturales pueden llegar a reducir cada año un 13% las visitas al hospital y el consumo de antidepresivos, según un estudio del Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal), impulsado por la Fundación ‘La Caixa’.
Es importante tener en cuenta que pasar tiempo en la naturaleza no va a solucionar todos nuestros problemas, pero sí puede mejorar nuestra salud global, siendo un gran apoyo en la recuperación de ciertas patologías psiquiátricas como son la ansiedad, el estrés crónico o la depresión mayor.

Desde Orbium recomendamos dedicar cierta parte del día a día a pasear por entornos naturales, alejados de las pantallas y observando el paisaje. Puede ser un buen momento para meditar, respirar profundamente, pensar o conversar con nuestros seres queridos.

Si tú o alguien de tu entorno presenta síntomas depresivos, no dudes en contactarnos. Te ofreceremos información acerca de la patología en cuestión y de nuestras opciones de tratamiento.

Redactado por Orbium Desarrollo.

Referencias

  1. Payne, E., Loi, N. & Thorsteinsson, E. (2020). The restorative effect of the natural enviroment on university students’ psychological health. Journal of Environmental and Public Health, 2020, 1-9. https://doi.org/10.1155/2020/4210285
  2. Lee, J., Park, B., Ohira, T., Kagawa, T. & Miyazaki, Y. (2015). Acute effects of exposure to a traditional rural environment on urban dwellers: A crossover field study in terraced farmland. International Journal of Environmental Research and Public Health, 12(2), 1874-1893. https://doi.org/10.3390/ijerph120201874
  3. Calogiuri, G., Evensen, K., Weydahl, A., Andersson, K., Patil, G., Ihlebæk, C. & Raanaas, R. (2016). Green exercise as a workplace intervention to reduce job stress. Results from a pilot study. Work, 53(1), 99-111. https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/26684708/
  4. Lawton, E., Brymer, E., Clough, P. & Denovan, A. (2017). The relationship between the physical activity environment, nature relatedness, anxiety, and the psychological well-being benefits of regular exercisers. Frontiers in Psychology, 8, 1-11. https://doi.org/10.3389/fpsyg.2017.01058
  5. Swami, V. (2020). Body image benefits of allotment gardening. Ecopsychology, 12(1), 19-23. http://doi.org/10.1089/eco.2019.0032
  6. McCaffrey, R. Liehr, P. (2016). The effect of reflective garden walking on adults with increased levels of psychological stress. Journal of Holistic Nursing, 34(2), 177- 184. https://doi.org/10.1177/0898010115594934
  7. Min, K., Kim, H., Kim, H. & Min, J. (2017). Parks and green areas and the risk for depression and suicidal indicators. International Journal of Public Health, 62, 647- 656. https://doi.org/10.1007/s00038-017-0958-5
  8. Thompson, N. & Wilkie, S. (2020). ‘I’m just lost in the world’: the impact of blue exercise on participant well-being. Qualitative Research in Sport, Exercise and Health, 1- 15. https://doi.org/10.1080/2159676X.2020.1761433
  9. Guéguen, N. & Stefan, J. (2016).“Green Altruism”: Short immersion in natural green environments and helping behavior. Environment and Behavior, 48(2), 324-342. https://doi.org/10.1177/0013916514536576

Escrito en: Bienestar