Qué es el sueño

A menudo el ser humano se ha preguntado sobre el sueño. ¿Qué es? ¿Por qué dormimos?  A lo largo de estos capítulos iremos dando respuestas a muchas incógnitas sobre el sueño. Reflexionaremos sobre temas importantes y se darán pautas y herramientas para conocer y mejorar nuestro sueño. Para ello, primero es importante conocer exactamente qué es el sueño y sus posibles funciones.

Empezaremos por lo básico. El sueño es lo contrario a la vigilia, es la no vigilia. No obstante, eso no significa que estemos sin hacer nada o “desconectados”. Es un fenómeno fisiológico (tan natural como comer) activo. Reinstala, restaura, mantiene y reorganiza las condiciones del cerebro, así como todo el sistema neuronal.

Imaginemos una constelación de planetas. Un sistema solar que, en su conjunto, somos nosotros, y sus planetas son las diferentes características del ser humano. Planetas como el estado de ánimo, la atención, la memoria, el estrés e incluso nuestro metabolismo. Nuestro cerebro durmiente se encarga de poner todos los sistemas a reforzar y a consolidar lo que es útil para nuestro sistema, y a desechar lo que es inservible dentro de nuestro sistema planetario.

A pesar de todo, muchas de las funciones del sueño siguen siendo, a día de hoy, un misterio.

Fases del sueño

Fases del sueño

Durante toda la vida dormimos un promedio de siete u ocho horas al día. Es decir, ¡estamos un tercio de nuestra vida durmiendo! No obstante, con el paso de los años se ha visto un ligero descenso de nuestras horas de sueño. Y, además, dependiendo de la persona, pueden necesitarse más o menos horas para conseguir un correcto descanso.

Durante esas siete u ocho horas, el sueño se divide en 5 fases (también se suele dividir en sueño REM y sueño no REM).

  • Fase I, adormecimiento: La más corta. Nada más abandonar la vigilia, nuestro cerebro empieza el proceso, aunque es muy sensible y susceptible de interrumpirse. Dura unos pocos minutos.
  • Fase II o etapa de sueño ligero: Nuestra respiración y ritmo cardíaco disminuye. ¿Alguna vez has soñado que te caes y te despiertas súbitamente? Es esta fase.
  • Fase III y IV: Sueño de ondas lentas. Profunda relajación, etapas importantes para determinar la calidad del descanso. Es difícil despertarnos. Sumando estas cuatro fases, un ciclo dura 45 minutos.
  • Fase de sueño REM: también conocido como etapa de sueño paradójico. Esta dura 45 minutos de por sí, aproximadamente. Es el 25% de nuestro ciclo de sueño. En esta fase ocurre lo que llamamos ‘sueños’, al menos los que recordamos al día siguiente y nos intrigan tanto.

¿Y si no dormimos?

Tendremos ocasión de hablar de situaciones y causas que nos impiden dormir y sus consecuencias a corto, medio y largo plazo. No obstante, hoy solo haremos una pequeña aproximación.

El no dormir literalmente descompensa el metabolismo. Impide que ciertas funciones se completen y quizá, algo que hayas aprendido o vivido ese día no se consolide igual, por lo que puede que lo olvides pronto. Además, al día siguiente, las funciones como la atención o la memoria tienen un peor funcionamiento.

Conclusión

Dormir y descansar es muy importante y puede influir de muchas formas en nosotros. Nuestro día a día se transmite al sueño y viceversa. Es importante conocernos y preparar una buena rutina de descanso para evitar posibles trastornos del sueño, como es el insomnio. No existe una solución mágica para estos, pero a través de herramientas, consejos y una buena higiene del sueño, podemos mejorar nuestro descanso nocturno y, por tanto, nuestro día a día.

Para cualquier duda, consulta o tema a tratar estamos siempre disponibles.

Algunas Referencias:

-REV NEUROL 2006; 43 (7): 409-415. Aproximación a las funciones del sueño

– Rev. Méd. Uruguay 1987; 3: 47-57. Esquema de la fisiología del sueño.